Breviario sobre las ramas de la filosofía y sus períodos históricos

Fresco de La escuela de Atenas.

Si bien definir a la filosofía no es fácil (pues determinar es, a su vez, limitar), se halla en el estudio del hombre (del yo) y la naturaleza (del no-yo) su acepción más apropiada, reconocida por el deseo popular de librarse de ataduras tradicionales y concepciones dogmáticas. Filosofar es el ejercicio que combate los discursos que han configurado nuestra vida y han matizado al mundo y descubrir, en el fondo, la clave para comprender lo que nos rodea día a día: el amor por el conocimiento.

RAMAS DE LA FILOSOFÍA

La filosofía se ocupa de miles de asuntos, por ello, los expertos han clasificado la misma en diferentes disciplinas y ciencias que, conforme a cierto orden cronológico, se han segmentado de algunas otras e incluso se han independizado enteramente, tomando como esquema el momento en el cual la filosofía fraguaba como la matriz de todo conocimiento.

1. Metafísica, el estudio de las causas y los orígenes de la realidad: El establecimiento de un sistema causal objetado al entendimiento de las cosas y la clasificación de las mismas según su naturaleza y vinculación define el objetivo principal de la metafísica, la cual se sirve del resto de ciencias como auxiliares para concebir una comprensión entera de la realidad, descubriendo sus enigmas y hallando las claves del funcionamiento del mundo mediante el análisis y la síntesis, previamente experimentales y empíricos. 
2. Epistemología, la teoría del conocimiento: Nuestro conocimiento del mundo es limitado y depende enteramente de las impresiones que los sentidos nos proporcionan. La cuestión por la imagen verdadera de la realidad y el aparato receptivo de aquellas apreciaciones nace en los planteamientos base de la teoría del conocimiento, la cual se interesa, esencialmente, por lo que, en nuestra condición humana, nos es posible indagar.
3. Ética, la reflexión del buen vivir: Los problemas sobre lo bueno y lo malo, lo justo e injusto, siempre han cautivado la reflexión humana, sentando sus bases sobre lo que significa obrar conforme a los criterios establecidos. La ética filosófica se encarga de hallar la clave del comportamiento mortal, estudiar con perspicacia sus orígenes y determinar detalladamente los principios orientados al contenido moral del accionar humano y la conquista existencial de la felicidad.
4. Ontología, el ente en tanto existe: Reflexiona sobre la existencia de las cosas, sus modos de ser y la esencia de las entidades que se consideran habitar en la realidad, asimismo, intenta hallarle sentido a las concepciones metafísicas y buscar el porqué de lo que yace ante la descripción de lo que es sustancial y accidentalmente.
5. Lógica, los principios del bien pensar: La fundamentación del razonamiento es primordial en la construcción de las hipótesis que consideran la formación de las demás ciencias y disciplinas filosóficas. La lógica indaga por los principios del pensamiento válido y verdadero, examinando cómo diversas proposiciones se vinculan conceptualmente en la creación de conclusiones, ya sean de carácter deductivo o inductivo.
6. Física, los fundamentos rectores del cosmos: La pregunta por los mecanismos que abarquen la explicación de los fenómenos materiales ha sido, desde siempre, el interrogante principal de toda civilización. Los filósofos físicos emprenden el camino a la racionalización de la naturaleza por medio del establecimiento de una unidad ordenada por principios rectores que expliquen el porqué y, con ello, el cómo de los procesos a los que subyace la constitución regulada del cosmos.
7. Política, las formas sociales de gobierno: La organización de las sociedades y la distribución de los poderes remiten a la conformación de sistemas políticos, todos enlazados a las teorías filosóficas que componen formas de gobierno orientadas, en su mayoría, a la satisfacción de un grupo social determinado, idealmente, el de toda la población.

 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA

1. El nacimiento de la filosofía en Grecia: Grecia es comúnmente nombrada como la cuna del conocimiento, aquello no es realizado en vano, pues, dentro de sus colonias, florece la madre de todo conocimiento: la filosofía, y, con ella, la más grandiosa revolución intelectual de la historia.
2. Los filósofos presocráticos y la constitución material del mundo: Los primeros que filosofaron se encargaron del funcionamiento interno de la naturaleza y del descubrimiento de una entidad general de la cual se generaran todas las cosas, establecen, así, aquel espíritu correspondiente a la explicación de los fenómenos a partir de un estado general, del cual brota la multiplicidad de las formas sensibles, siendo, en suma, el término en que se corrompen.
3. Sócrates y el gran giro antropológico: Sócrates y su mayéutica eran ya cotidianos en Atenas. El maestro de Platón solía reunirse con sus discípulos y hablar sobre problemáticas derivadas de la aplicación de su método interrogatorio: tales eran la justicia, el bien, el amor, la belleza, entre otros. En ciertas ocasiones, llegó a debatir con los maestros de la retórica, los sofistas, afirmando que el bien poseía un principio universal, no dado por los dioses ni por las leyes. Aquella sentencia sentó bases en sus acusaciones, las cuales lo llevaron a juicio y, posteriormente, a la muerte, revolucionando Grecia y ocasionando una gran tragedia que marcaría el declive de la sociedad ateniense.
4. Platón y la secta académica de las Ideas: El gran fundador de la Academia, Platón, hereda las enseñanzas de su maestro y aplica las ideas abstractas a un modelo ontológico y epistemológico, donde la sensibilidad era despreciada y la verdad era alcanzable sólo en un mundo ideal y perfecto, donde habitaba la idea, esencia de todas las cosas, no obstante, postulando un sistema harto dogmático, fundamentando el mismo en concepciones sobrenaturales imposibles de comprobar experimentalmente.
5. Aristóteles, el príncipe de la filosofía: Aristóteles, «siendo más amigo de la verdad que de Platón», combate sus teorías mediante la formulación de un argumento concerniente a la relación íntima de las ideas, revaloriza el papel de la sensibilidad en la aprehensión de conocimientos y proyecta en sus textos problemáticas de mayor preocupación, rescata, en suma, la física de los preplatónicos y establece al estudio de las causas como el trascendental en el entendimiento del mundo.
6. Las escuelas helénicas del período alejandrino: Posterior al auge de los peripatético, diversas corrientes de pensamiento helénico surgen en todo occidente, aquellas orientadas, prominentemente, al establecimiento de modelos éticos relacionados al placer epicúreo, la virtud estoica y la naturaleza cínica, donde surgirán múltiples formas de concebir al ser humano y su vínculo racional con su medio de existencia.
7. Los santos de la Iglesia, Agustín y Tomás de Aquino: San Agustín fue el primer destacado filósofo del cristianismo: formuló su propia teoría basándose en la doctrina cristiana y en la teoría ontológica de Platón. Siglos después, en el auge de la escolástica, Santo Tomás de Aquino adaptó la teoría hilemórfica de Aristóteles a las enseñanzas de la Iglesia Católica, postulando a Dios como el primer motor descrito en el esquema metafísico del mundo aristotélico.
8. La duda metódica de Descartes: Dudar de todo cuanto exista define el método cartesiano de la duda. Descartes se preguntó por todo lo que había aprendido y posicionó su enfoque en la cuestión del todo hasta encontrar una verdad absoluta, donde, mediante el pensamiento, comprobó su propia existencia: «pienso, luego existo».
9. El racionalismo matemático de Spinoza y Leibniz: Spinoza expuso su doctrina ética demostrada según el modelo de la geometría euclidiana, describió, en suma, con precisa objetividad matemática, el orden del mundo y la perfección de su ser más profundo, Dios. Leibniz, su contemporáneo, llamó a nuestro mundo «el mejor de los mundos posibles» y estableció un sistema de ordenamiento basado en mónadas configuradas por Dios, que dotaban al cosmos de cohesión y armonía.
10. El empirismo de Berkeley y Locke: Según la crítica de Locke, el alma, al nacer, era como una tablilla de cera sin escribir, en la que la experiencia trazaba, después, sus líneas. Berkeley, partiendo del empirismo, concluyó la inexistencia de la materia, siendo aquel concepto solo una idea de Dios proyectada sobre nuestra existencia, pues el mundo entero era un pensamiento del ello supremo.
11. El escepticismo de Hume y la crítica kantiana: Hume concebía una visión escéptica del mundo, donde nuestra capacidad para conocer era puesta en duda, asimismo, sostuvo que todo conocimiento se apoyaba externamente en la experiencia. Kant, su contraparte tradicional, hizo un gigantesco esfuerzo para unificar lo mejor de sus corrientes alternas: el racionalismo y el empirismo, revolucionando la filosofía con el gran giro copernicano que su teoría del conocimiento imparte en toda Europa y, posteriormente, el mundo. Según Kant, la razón nos proporciona las formas mentales con cuya ayuda podemos percibir la experiencia.
12. La síntesis de Hegel: Hegel, el filósofo ultra conocido por su complejidad, estructura su modelo del mundo y el pensamiento tomando como punto de partida un sistema de proposiciones (tesis) y contraproposiciones (antítesis) que se unifica en la conformación de la síntesis.
13. Lengua y filosofía, Wittgenstein: Wittgenstein llevó a la filosofía a un nuevo campo: la lengua. Según él, un análisis del idioma nos proporciona un entendimiento más preciso de la naturaleza de diversos problemas y cuestiones filosóficas.